jueves, 24 de enero de 2019

TÉCNICA DE REIKI EN MOVIMIENTO

MEDITACIÓN EN MOVIMIENTO. 

El objeto de la meditación es la unión armónica entre los planos inferiores y los superiores.

Existen numerosas técnicas de meditación y la meditación en movimiento es una manera de influir en tu estado de conciencia y una de las formas más potentes es a través del uso del cuerpo.

La conexión directa entre la mente y el cuerpo.

El baile, los ejercicios, y ciertas posturas pueden ser profundamente sanadoras cuando se usan con ese propósito. Trata de ser creativo y si no lo eres trata de creer que lo eres y muévete como alguien que lo es y pronto tu estado de conciencia cambiará.

La meditación de Reiki en movimiento integra la energía de Reiki más directamente en el cuerpo físico.

Es comparable en sus resultados a los ejercicios de Tai-chi o de Qi –gong, e incorpora la energía Reiki con afirmaciones y movimientos físicos.

Nuestro propósito al vivir en la Tierra es traer al cuerpo nuestra conciencia espiritual, que es nuestra verdadera esencia. Existe un ejercicio que ayuda a anclar Reiki en el aura Y en el cuerpo físico.

Crea una potente conexión con la Tierra y sana los Chacras inferiores. Te ayuda a centrarte cada vez más en tu propio poder y trae claridad a tu mente.

1- comienza separando ligeramente los pies, manteniéndolos en el piso a la misma altura que tus hombros. Dibuja en las palmas de tu mano varios símbolos de Reiki especialmente el DAIKOMYO y el CHOKUREI.

2- Trae ambas manos y colócalas separadas a unos quince centímetros frente a tu corazón. Piensa en Reiki y medita acerca de cómo la energía de Reiki se desarrolla y fluye a través de tus manos. Tal vez sientas vibraciones en ti o en tu alrededor, o incluso puedas visualizar las líneas ondulantes de energía fluyendo entre tus manos mientras construyes esa energía. Separa ligeramente las manos y vuélvelas a la posición original dos o tres veces.

3- Mueve tus manos en forma recta justo por encima de tu cabeza y estira al máximo los brazos. Da vuelta las palmas hacia el exterior. Baja los brazos haciendo con ellos un círculo y colócalas en la posición previa, frente al corazón.

4- Toma una inspiración muy profunda y al expirar, coloca las palmas de tus manos enfocadas hacia el suelo, en paralelo a este, e imagina que mientas descienden le está enviando la energía a lo profundo de la tierra a través de tus piernas y de tus pies.

Repite ahora los pasos 1,2,3 y 4 representan el movimiento físico.

Practica varias veces hasta poder sentir la energía que fluye. Recuerda hacer este movimiento con un sentimiento de absoluta confianza y poder.

5- Repite ahora los pasos 1 a 4 y al dibujar el círculo, canta en voz alta el nombre sagrado del DAIKOMYO (si alguien puede oírte dilo en silencio).

Inicia el canto mientras mueves tus manos hacia arriba y finaliza cuando descienden hasta ubicarse frente al corazón. Entonces mueve la energía en dirección a la Tierra, como se describió en el paso 4.

6- Repite el proceso entero tres veces.

7- Ahora repite nuevamente el proceso, sustituyendo el nombre del símbolo por la frase “ESTABLEZCO MI DIVINA PRESENCIA EN LA TIERRA” (Repítelo tres veces.)

8- Vuelve a repetir el proceso, utilizando nuevamente al cantar el nombre del símbolo DAIKOMYO. Repítelo tres veces.

9- Vuelve a repetir el proceso, sustituyendo el nombre del símbolo por la frase: “CUMPLO MI PROPÓSITO DIVINO EN LA TIERRA”

10- Vuelve a repetir el proceso, utilizando nuevamente al cantar el nombre del símbolo: DAIKOMYO (repítelo tres veces).

Estos pasos son un set, haz tantos sets como quieras. Este ejercicio sirve para aterrizar y llenarse de energía.

Te ayudará a centrarte en tu poder. Hazlo antes de una sesión de Reiki o antes de dictar una clase. Hazlo antes de un evento importante, cuando te levantes por las mañanas o cuando necesites más confianza o poder personal.

 Con la práctica de este ejercicio encontrarás un medio poderoso para entrar en un estado de conciencia creativo cada vez que lo desees.

MEDITACIÓN EN EL REIKI

REIKI Y LA MEDITACIÓN

La meditación es un medio muy valioso para encontrarte a ti mismo, puede designarse como “cultura de la conciencia”.

Quienes practicamos meditación intentamos sumergirnos en nuestro interior y transformar el “YO” o captar de un modo totalmente consciente el verdadero “SER”.

El éxito de la práctica de la meditación depende esencialmente de dos factores: el desapego y el no-hacer.

Esto significa despejar la mente de todos sus contenidos y desprendernos del afán de intervenir en la realidad.

La profunda relajación que provoca el contacto con tu propio cuerpo y el hacerte sentir sus flujos energéticos son factores que desencadenan el proceso meditativo.

La práctica de la meditación trascendental está basada en la repetición de un mantra, goza de un éxito incontestable.

En esta forma de meditación, el mantra viene habitualmente dado por el maestro espiritual.

La eficacia de la repetición del mantra ha sido verificada por medio de electroencefalogramas.

Un estado de relajación se adueña del espíritu provocando la aparición de ondas alpha en la gráfica. Artur Avalon en su obra nos dice: “el mantra se llama así porque se obtiene a partir de un proceso mental.

MAN: SIGNIFICA PENSAMIENTO. TRA: SIGNIFICA LIBERACIÓN de las ataduras al mundo fenoménico. 

Un mantra representa el mundo percibido con sonido (bajo su aspecto sonoro).

La primera vibración que tuvo lugar al principio de la creación fue el sonido original “OM” que es la gran mantra-semilla porque está en el origen de todos los sonidos compuestos.

Su impulso creador es emitido por la boca, escuchado por el oído y asumido por el espíritu.

EL MANTRA ES UN SONIDO CANTADO O UN CONJUNTO DE SONIDOS O PALABRAS CARGADOS DE UN PODER ESPECIAL.